domingo, 10 de marzo de 2013

VACANCY


Así que aquella noche alquilé una habitación en una pensión mal nombrada Paradise y volví a revisar mis cosas. Decidí que al día siguiente buscaría algún trabajo; quien sabe, camarero o algo. Y así fue. Después de unas cuantas cafeterías, me cogieron en una de dueños peruanos a los que les gustó mi historia. Creo que han cometido un error contratándome, pero no seré yo quien se lo diga.

Qué fácil estaba siendo todo...

Descansé un rato en mi cubo de 2x2 en el Paradise y salí a comprar algo de ropa y de comida. Fue cuando me di cuenta de que no había comido nada desde aquel hot dog. Decidí darme un homenaje y tomar un buen café en uno de estos establecimientos modernos donde todo parece de revista, y la gente se lleva su portátil, y piden vasos con un trozo de cartón para no quemarse mientras lo toman de camino al trabajo porque tienen prisa. Después, fui a un centro comercial en las afueras, que era mucho más barato. Volví a "casa" después de un par de horas con varias bolsas de ropa pero sin lugar para ponerla. Era media tarde, perfecto para dar una vuelta y aclarar ideas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario